Abogacía, profesión tan antigua como respetada, multifacética y vital para el funcionamiento de la sociedad.
Sin duda una profesión demandante, exigente y estresante a rabiar, con largas y extenuantes horas de trabajo, plazos estrictos y la responsabilidad de manejar casos que pueden tener un impacto significativo en la vida de los clientes. Los abogados somos esos profesionales capacitados para asesorar y representar a individuos, empresas y organizaciones en asuntos legales.
Estereotipados hasta la médula, los abogados se cree, manipulamos la verdad o simplemente ocupamos trucos legales para ganar casos, pero la mayoría de profesionales que conozco o a quienes imparto clase, eligieron esta carrera porque están comprometidos con la justicia y buscan ayudar a las personas.
Recordemos que en nuestro sistema judicial y en todos los sistemas que se precien de ser justos, todo individuo tiene derecho a una defensa legal y adecuada, y es así que muchos de mis amigos abogados han tenido un impacto positivo significativo en resolución de disputas, protección de derechos y acceso a la justicia, si bien siempre habrá criticas muchos de nosotros trabajamos con integridad y dedicación, creo firmemente que a ellos va esta felicitación por el día del abogado, no importando el ámbito de acción donde se desarrollen.
En mi calidad de abogada y maestra de abogados, quiero extender la felicitación a todas aquellas mujeres y hombres que tocan positivamente a individuos empresas e instituciones con su labor legal, a esos hombres y mujeres comprometidos, de profundo conocimiento jurídico, que son argumentadores, negociadores, de pensamiento crítico y analítico, y que cuentan con una profunda ética profesional, a esos hombres y mujeres que tienen la habilidad para mediar y resolver conflictos de manera efectiva buscando soluciones justas y equitativas… a ellos les digo Feliz día abogados.
Nos leemos en la próxima.
@ErikaSpezia