En la cuenta regresiva para el comienzo de la gran cita mundialista, FIFA+ reflexiona sobre momentos memorables de torneos pasados, celebra a legendarias figuras y se prepara para la Copa Mundial Femenina más importante de todos los tiempos…

Pocas selecciones nacionales en la historia del fútbol pueden decir que disfrutaron de un periodo de dominio similar al que tuvo Alemania entre 1995 y 2009.

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En ese periodo, las peso pesadas europeas ganaron cinco Campeonatos Femeninos de la UEFA y conquistaron dos Copas Mundiales Femeninas de la FIFA.

Birgit Prinz, que ganó muchos trofeos y marcó goles por diversión en su país natal con el 1. FFC Fráncfort, aportó el toque dorado a la época dorada de Alemania.

Puede que Prinz estuviera en la cima de su indomable poderío en el torneo de Estados Unidos 2003. Mientras las anfitrionas eran las vigentes campeonas y las favoritas para hacerse con su tercera corona mundial, Alemania y su delantera superestrella tenían otras ideas.

La extraordinaria goleadora marcó en todos los partidos hasta el decisivo contra Suecia. Allí, dio el pase de la muerte para que Maren Meinert restableciera el empate, antes de que Nia Kunzer anotara el gol de oro de la victoria.

Con sus siete goles, Prinz se convirtió en la primera jugadora que consigue la Bota de Oro adidas y el Balón de Oro adidas en la Copa Mundial Femenina de la FIFA, de camino a su segundo galardón consecutivo de Jugadora Mundial de la FIFA del Año.

En la edición de 2007, la leyenda brasileña Marta eclipsó a Prinz en la conquista de los dos galardones personales, pero las alemanas volvieron a alzarse con el título al imponerse por 2-0 en la final a sus homólogas sudamericanas.

En 2011, Prinz puso punto y final a su ilustre carrera y se retiró como tres veces Jugadora Mundial de la FIFA, dos veces campeona del mundo y una auténtica leyenda del fútbol.