Para la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) las cifras de incremento de la pobreza dadas a conocer por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) en su Medición de Pobreza Multidimensional 2020, demuestran la insuficiencia de las acciones del Gobierno Federal, no sólo para revertir el problema, sino para evitar que más personas vivan en esta situación en el país.
De acuerdo con los datos revelados, en el 2020 se registraron 3.8 millones de personas más en pobreza y 2.1 millones de personas más en pobreza extrema de las que había en 2018. Este escenario se debe, en gran medida, a una caída de los ingresos como consecuencia de la pandemia, de ahí la importancia de implementar políticas públicas efectivas que fortalezcan las estrategias gubernamentales encaminadas a la reactivación económica.
Coparmex establece que el impacto de la pandemia en los ingresos de las familias mexicanas ha sido desigual. La medición del CONEVAL revela que entidades con vocación turística han sido las más afectadas. Este es el caso de Quintana Roo y Baja California Sur, que aumentaron su porcentaje de población en situación de pobreza en 17.3 y 9.0 puntos porcentuales, respectivamente. Además, Quintana Roo ha sido la entidad con mayor aumento en el porcentaje de población en pobreza extrema.
En el informe de CONEVAL, cuya fuente son los datos obtenidos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) que publica el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) cada dos años, encontramos que uno de los datos más alarmantes se registra en el indicador de salud, donde la población con carencia por acceso a servicios de salud pasó de 16.2 por ciento a 28.2 por ciento. Cabe mencionar que este rubro registró el mayor incremento porcentual.
Coparmex advierte que este aumento de casi el doble de puntos porcentuales significa que, de 2018 a 2020, 15.6 millones de personas dejaron de contar con acceso a servicios de salud. Esto adquiere una mayor relevancia en un contexto de pandemia y ponen de manifiesto las deficiencias que ha tenido la creación e implementación del Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) en sustitución del Seguro Popular que incluía la cobertura de gastos catastróficos, así como el desabasto de medicamentos, lo que ha provocado que sean las familias las que con su patrimonio hagan frente a las contingencias en materia de salud.
Por ultimo, el Sindicato Patronal Nacional, considera que las cifras no sólo muestran cómo ha crecido la pobreza en dos años, sino que pone en evidencia la importancia de una reactivación económica urgente, sostenible y prolongada en el tiempo que permita la creación de los 438 mil empleos formales que aún están pendientes por recuperar y que atienda las implicaciones del cierre de por lo menos un millón de pequeñas y medianas empresas.










